¿Quién se podría imaginar que hay un bosque de almendros en pleno centro de Madrid?
Pues sí, lo hay y está en la más larga y castiza de todas las calles de Madrid, en la “Cá Alcalá” que diría un chulo madrileño.
En plena calle de Alcalá está el parque de la Quinta de los Molinos y aunque cada vez más gente lo conoce, hay muchísimos madrileños que en su vida han estado.
Yo tengo que confesar que conocí esta maravilla de parque gracias a las protagonistas de este post: Jimena y su mamá, mi querida amiga Mar.
Allí hicimos las fotos de la primera sesión de Jimena, cuando tenía 6 mesecitos..y ahí volvimos hace unos días, cuando los almendros estaban en su máximo esplendor.
Yo por mi parte, además de mi equipo, me llevé a un ayudante de lujo: mi pequeño Pablo.
¡Cómo se lo pasó!
Me ayudó a llevar el trípode, se portó super bien mientras yo hacía fotos a Jimena y Mar, pero lo mejor fue cuando, sin pedírselo, Jimena y él se cogieron de la manita y se fueron a pasear…fue un momento de ternura total (no es porque sea mi hijo y la hija de mi amiga, es que son adorables a rabiar 😉 y si no juzgad vosotros)
La verdad es que pasamos una tarde muy agradable, la pena es que el sol se fuera tan pronto y no pudiéramos hacer más fotos.
La verdad es que los almendros estaban preciosos y Jimena es un bombón, un derroche de estilo con lo pequeñita que es, pero bueno “de casta le viene al galgo” ;).
Así que este post es mi particular bienvenida a esta primavera recién llegada…espero tener muchas más sesiones primaverales con bebés&niños y poder compartirlas con vosotros.
Un beso y feliz vacaciones (para los que las tengáis)
Carol



