La mayoría de las mujeres no nos gustamos cuando estamos embarazadas..es una pena, pero es así.
Los primeros meses nos vemos gordas, porque aún no parecemos embarazadas. Nuestro cuerpo va perdiendo su forma y no sabemos cómo vestirnos. Y cuando ya vamos teniendo formas de embarazada nos vemos hinchadas, raras.
Total que por H o por B lo que menos nos apetece es que nos hagan fotos…craso error, y no lo digo por decir, lo digo porque a mi fue a la primera que le pasó y luego me arrepentí de no tener fotos de mi primer embarazo.
Eso sí, en el segundo ya no me pasó y no sabéis cómo me alegro de habérmelas hecho.
Porque, de acuerdo, estaba gordita (en total cogí 20 kilos, nada más y nada menos) pero estaba mucho más guapa de lo que yo me veía y sólo cuándo vi esas fotos me di cuenta.
Total, que esto mismo que os cuento le pasó a Isa, la prota de este post, que durante su primer embarazo ni se lo planteó y en este segundo, sus amigas no le dieron opción…le regalaron una sesión de fotos de embarazo conmigo.
Fue tan fácil cómo llamarme y les preparé una tarjeta regalo para Isa. Y luego ella me llamó para quedar conmigo precisamente el día que cumplía 7 meses de gestación..por eso hicimos la foto del 7 con sus dedos.
Pues nada, os dejo el resultado…¿no me diréis que no está guapa?
Espero que os gusten.
Un beso,
Carol